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martes, 13 de julio de 2010

La Limonada



Foto: Con César en La Limonada

Namaste!

Situado en el corazón de la Zona 5 de la capital guatemalteca, LA LIMONADA es uno de los asentamientos marginales más peligrosos de la ciudad. Dividido en 9 colonias, es un núcleo castigado por la delincuancia, la droga y los conflictos entre maras (pandillas violentas).

Cada una de estas 9 colonias, algo así como pequeñas parcelas dentro de la propia barriada, está controlada por una mara distinta que a través de la delincuencia controla la actividad de su "territorio".

No existe interacción entre las colonias de La Limonda pues si alguno de los miembros de una mara o cualquier persona relacionada con ellos se atreviera a salir de su colonia para entrar en territorio de otra mara, inmediatamente sería asesinado por la banda rival.

La violencia entre pandillas es una de las principales lacras que azota al país y que somete a muchos de sus habitantes a un terrible régimen del terror. La violencia de estas bandas no tiene límites.

Bien, pues hoy, César y yo hemos tenido la oportunidad de visitar esta barriada marginal, una de las más grandes de Centroamérica, La Limonada. La visita se ha producido de la mano de la ONG "Limonada International".

http://www.lemonadeinternational.org/espanol.html

Esta organización, fundada hace 16 años por una guatemalteca, Tita, realiza un increible trabajo en esta barriada marginal. A través de dos escuelas (Limón y Mandarina) situadas en dos colonias diferentes del asentamiento, la organización provee educación y apoyo psicológico y social a los niños y adolescentes de las familias de la barriada.

Resaltar el importante trabajo que la asociación hace por la desvinculación de los muchachos de las bandas violentas y su integración en la sociedad.

Ha sido guiados por su fundadora, Tita, como hemos conocido el proyecto y el barrio. Hemos visto desde las actividades educativas con los niños más pequeños hasta los talleres de oficios con los jóvenes "mareros".

El paseo por el asentamiento ha sido una increible experiencia, viva y tensa. Miradas intrigantes, sonrisas desconfiadas. Caminar por las callejuelas de esta realidad ha sido un autentico baño de emoción.

Muchos han sido los pensamientos y sentimientos durante la visita: marginalidad, falta de recursos, violencia pero también... el oxígeno de una segunda oportunidad, mucho corazón y la historia viva de una mujer fuerte y carismática que ha llenado de esperanza a los que queremos que el HACER se convierta en un estilo de vida.

Un beso fuerte.

Jorge

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