Un pequeño precio

Foto1: La familia de Nelson // Foto2: Gersoncito // Foto3: Nelson y su selva

Namaste!

Hoy ha sido un día muy emotivo. Ya estamos en Río Dulce, y esta mañana hemos ido a visitar la aldea Crec Maya, donde vive Nelson.

Crec Maya es una pequeña aldea situada en un auténtico paraiso natural. Llegar allí no es fácil, una hora de lancha y después 45 minutos a pie a través de la selva. Un camino complejo pero a la vez un auténtico disfrute para la vista. Quizá el espacio natural que más me ha gustado de Guatemala.

Nelson y su hermano, Gregorio, nos han conducido a través de la selva hasta su casa, donde su familia nos ha dado una gran acogida. Hemos conocido a sus hermanos, sobrinos, a sus padres. Nos han preparado una comida especial y una vez más nos han colmado de sonrisas y hospitalidad.

Me ha gustado mucho conocer el entorno real de Nelson y me ha tranquilizado ver que, a pesar de las dificultades, vive en un contexto donde hay amor. Y tiene una familia que le quiere y que vela por él.

Hemos pasado un gran día, hemos jugado, hemos recorrido la aldea y también hemos visitado a otro de nuestros peques, Gersoncito, el más peque de mis varones pequeños.

En definitiva, me he acercado a la vida de Nelson, que me ha enriquecido y me ha dado la tranquilidad que necesitaba antes de decirle "hasta pronto".

Me ha costado mucho dejarle, pero necesitaba volver a ver a este pequeñajo. Cuando le dejé en Casa Guatemala, se quedó muy afectado y tenía ese momento clavado en el corazón. Le voy a extrañar muchísimo, y seguro él a mi también, pero hoy me he despedido de él dejandole con una sonrisa y con su familia alrededor. Necesitaba que fuera así.

Si algo tienen estas experiencias es que dejan a flor de piel los sentimientos, dejar a mis peques me está costando mucho, especialmente a algunos de ellos con los que los vínculos son más fuertes. Pensaré cada día en Nelson y trataré de verle pronto.

En cierta manera sufro, pero estoy bien, es un pequeño precio por todo lo que quiero.

Jorge